Miss Buenos Aires, de 60 años, se queda a las puertas de Miss Universo, pero atrae la atención de todo el mundo
En el escenario de Miss Buenos Aires, competí con mujeres de 18 a 73 años. Vi concursantes de todas las tallas y características físicas. Entre mis compañeras había mujeres con estudios secundarios, enfermeras, personal de seguridad e incluso un fontanero.
- 2 meses ago
julio 28, 2024
Alejandra won Miss Buenos Aires at age 60. | Photo courtesy of Alejandra Rodríguez
BUENOS AIRES, Argentina Suele decirse que los sesenta son los nuevos cuarenta. La gente vive más, se cuida más y tiene acceso a más oportunidades. Vemos que se está produciendo un cambio de paradigma en cuanto a la edad. Así que, a los 60 años, seguí el consejo de una amiga y decidí participar en el concurso Miss Buenos Aires, precursor de Miss Universo.
Volver a los desfiles me evocó recuerdos de mi primer concurso a los 17 años. A los 60, me preocupaban los estereotipos y prejuicios asociados a mi edad, pero quería hacer algo diferente, probar algo nuevo. Mi amiga entró en el concurso a los 55 años y me ayudó a superar mis preocupaciones. Reinventándome, me uní a mujeres de toda la provincia de Buenos Aires y subí al escenario.
Una concursante de 60 años inspira a mujeres de todas las edades
Mi amiga Roxana empezó a trabajar de modelo después de cumplir 50 años y tuvo un gran éxito. Se apuntó a una escuela exclusiva de modelos a través de la agencia Francis Lescano. Sin embargo, nunca se me ocurrió hacerlo yo misma.
Un día, Roxana se enteró del concurso Miss Buenos Aires y se inscribió. Me llamó por teléfono y me animó a inscribirme con ella. «¿Hay categorías por edad en el concurso?», le pregunté. Imaginaba que competiría con otras mujeres de mi edad. «No», me dijo Roxana. «Cualquiera puede inscribirse a partir de 18 años». Eso me asustó.
Existen concursos en todo el mundo para personas de más de 50 años. Sin embargo, ésta era la primera vez que mujeres de mi edad podían competir en Miss Universo. Desde 1958 hasta finales del año pasado, Miss Universo tenía un límite de edad de 28 años. Hoy la única restricción es ser mayor de edad. Otro cambio importante fue permitir que compitieran mujeres casadas, divorciadas y embarazadas, así como madres.
En el escenario de Miss Buenos Aires, competí con mujeres de 18 a 73 años. Vi concursantes de todas las tallas y características físicas. Entre mis compañeras había mujeres con estudios secundarios, enfermeras, personal de seguridad e incluso un fontanero. Todo tipo de profesionales formaban una pizarra muy diversa. Cuando me apunté al concurso, mi teléfono empezó a sonar porque me llamaban amigos diciendo que se sentían inspirados. «Si tú puedes hacerlo a los 60 años», decían, «nosotras también podemos».
A pesar de no ganar Miss Universo Argentina, la concursante se convierte en un fenómeno mundial
Después de alzarme con la corona en Miss Buenos Aires, me embarqué en un aluvión de actividades. Tomé clases de oratoria y maquillaje a través de Zoom. Me ofrecieron clases prácticas sobre la pasarela. Aprendí cómo una concursante de Miss Universo camina de forma diferente a una modelo, y respondí a preguntas sobre mi objetivo en el concurso.
Luego, el 25 de mayo de 2024, participé en el concurso Miss Universo Argentina representando a la provincia más grande entre todas las competidoras. Para mí era importante destacar la confianza en mí misma por la que luché toda mi vida. De niña me faltaba confianza, pero trabajé constantemente para mejorarme. Evidentemente, ese trabajo dio sus frutos.
[Aunque no gané la oportunidad de representar a Argentina en Miss Universo], participar en el concurso creó un antes y un después en mi vida. Aunque sorprendente e inesperado, me encanta que gente de todo el mundo se haya puesto en contacto conmigo. Desde Italia a España, pasando por países de toda Europa, participé en unas 70 entrevistas. El auge de la atención dio lugar a artículos sobre mí en todo el planeta.
Pasé de ser una mujer anónima a experimentar una fama inesperada, lo que me inspiró para emprender nuevos proyectos. Quiero dedicarme al periodismo relacionado con el turismo y la moda, seguir modelando y centrar mis mensajes en la vida sana y el fitness. Sobre todo, quiero inspirar a la gente.
Como niña tímida que crecía con mis abuelos, tenía una personalidad insegura. En cuanto a los hombres, tuve muchas opciones, pero los que siempre quise parecían escaparse. Me casé hace años, pero descubrí que estoy mejor sola que mal acompañada. Ha pasado mucho tiempo desde que tuve una relación y no tengo hijos. Aprendí a proporcionarme seguridad
Un mensaje a las mujeres sobre cómo cuidarse durante el envejecimiento
Cuanto mayores nos hacemos, más debemos cuidarnos y mantenernos. Aunque siempre he sido una persona físicamente activa que comía sano, últimamente me centro en los alimentos naturales. Durante cinco años comí exclusivamente vegetariano, pero he empezado a incorporar la carne. Las frutas y verduras siguen siendo parte básica de mi dieta y evito las harinas, pero no hasta el extremo.
Tres veces por semana voy al gimnasio. Entre medias, camino y hago ayuno intermitente. Cuando surgen problemas de salud, me centro en tratamientos naturales como la radiofrecuencia, la bioestimulación y las inyecciones de plasma. No fumo y bebo poco alcohol.
Estar en la naturaleza sigue siendo importante para mí y tomo el sol en verano, pero me protejo la cara y no me expongo en las horas punta. Aun así, me encanta la playa y necesitamos la vitamina D. Saco tiempo para meditar y estar rodeada de animales.
Mi vida intelectual también sigue siendo importante. Como periodista y abogada, trabajé durante un tiempo en la prensa de la Cámara de Representantes, pero ahora soy asesora jurídica de un hospital. Todas estas cosas, creo, me mantienen sana, en forma y guapa.
Las experiencias que viví en los concursos de Miss Buenos Aires y Miss Argentina serán para siempre memorables.
